En este bloque
hemos hablado, como su título indica, de la lectura y la animación lectora.
Como ya he dicho
en otros artículos, creo que es necesario que los maestros aprendamos a ser
buenos animadores lectores y que sepamos transmitir a nuestros alumnos el gusto
por leer.
Personalmente
considero que es necesario que los niños lean, pero cuando a alguno de ellos se
le dice en el colegio que ha de hacerlo, la mayoría te miran con cara de aburrimiento.
Esto es algo que
me preocupa, y algo que espero conseguir cambiar en mis alumnos cuando los
tenga. Pero ¿cómo hacerlo?
Hay muchos
estudios y muchas opiniones al respecto, pero dejando a un lado la teoría, ¿Qué
es lo que realmente podemos hacer con los niños para animarles a leer?
Bien, para
empezar es importante una motivación por parte del profesor. Los alumnos no
tienen que ver la lectura como unos deberes más o como una actividad más en la
que te van a poner nota.
Otra de las
cosas importantes son las actividades que se hacen con los niños en relación a
los libros que se leen. Sería conveniente hacer actividades antes de la
lectura, durante la lectura y después de la lectura.
Las actividades ANTES
DE LA LECTURA están enfocadas a:
- Conocer
la información que nos aporta el libro (portada, contraportada, solapillas)
- Aproximarse
al autor de la obra.
- Hacer
predicciones sobre el contenido y/o la forma.
- Interesarse
por el tema o los temas que se desarrollan en la historia.
- Investigar
sobre algunos aspectos interesantes para la comprensión.
- Identificarse
con personajes, actitudes, situaciones, etc… que encontrarán en la lectura.
Las actividades que se
han de realizar DURANTE LA LECTURA han de desarrollarse para permitir al alumno
recordar, interpretar, reflexionar, argumentar, profundizar, etc. diferentes
aspectos del contenido del libro que se esté leyendo.
DESPUÉS
DE LA LECTURA es bueno hacer actividades con los alumnos que les permitan
analizar la historia de forma global, así como sacar conclusiones, comentar
algún hecho de la historia, etc.
Lamentablemente, y como
ya mencioné en el artículo del bloque 1, nada de esto se hace con los alumnos,
por lo menos por lo que yo he podido vivir en mis prácticas de 3º curso de
Educación Primaria.
Lo único que hacen al
terminar de leer un libro es rellenar una ficha de lectura, en la que ponen
título del libro, autor, resumen del mismo y hacen un dibujo.
Por otra parte, y relacionado
también con las experiencias que he podido vivir en mis dos cursos de
prácticas, quería compartir con vosotros las diferentes “estrategias”, que se
llevan a cabo en algunos colegios en cuanto a la lectura.
En mi colegio de prácticas del año
pasado, se llevaba a cabo una actividad llamada “El árbol de la lectura”, ésta consistía en que había un
árbol pintado en una de las paredes de la clase, de cuyas ramas colgaban unos
sobres, uno por alumno, que habían decorado ellos mismos y en los que habían puesto
fotos suyas. Cada vez que en casa se leín aun libro, debían llevar a clase un
papel con el título, el autor y el número de páginas del libro, debían contarle
a sus compañeros y profesora de qué iba dicho libro y cuál era su final, y
debían meter dicho papel en su sobre. “Ganaba” el que más papeles metía en su
sobre, aunque la realidad era que no había ningún premio.
Lo cierto es que los niños leían bastante, pues había
niños que cada poco tiempo decían que traían un papel para meterlo en el sobre
del árbol. Sin embargo, también había niños que no leían nada más que lo
obligatorio.
Este año en las prácticas, además del libro de lectura que
leían en case todos juntos, cada alumno debía llevarse a casa unos cuatro
libros por trimestre, cogidos por ellos mismos, bien sacados de la “biblioteca
de aula” o bien cogidos de casa.
Dicha “biblioteca de aula” estaba formada por tres o
cuatro libros de cada niño que a principio de curso llevan a clase y se quedan
allí. La tutora llevaba el control de los libros y de quién se lleva qué libro
a casa.
En 3º de Primaria, se contaban los libros que los alumnos se habían
leído, mientras que en 5º de Primaria se contaban las páginas.
Es cierto que ésta actividad hacía que algunos niños
leyeran más, pero también es cierto que otros niños seguían leyendo sólo lo de
clase. Por otra parte, también había niños que, por el hecho de ganar a sus
compañeros en el número de libros o de páginas, leían más.
Estas actividades no me parecen malas como tal, pero el
hecho de que los niños tomen la lectura como algo competitivo no me gusta. Podéis
pensar ¿y qué si lo hacen por competir? Mientras lean más, objetivo cumplido… y
en cierto modo no os falta razón, pero ésa es la vía fácil, y además no es lo
que debemos buscar.
No tenemos que hacer que los niños lean por competicón,
por obligación ni por que se les va a poner una nota; tenemos que hacer que
lean porque ellos quieran leer, porque les guste coger un libro y leerlo… pero
claro, ahí está la dificultad y muchos se quedan en lo fácil y en lo que en
cierto modo da menos trabajo.
También en este colegio, relacionado con la lectura, se
llevaba a cabo una actividad entre clases llamada el “Apadrinamiento lector”. Ésta
consistía en que a cada curso se le
asignaba un curso apadrinado; así 3º de Primaria tenía como apadrinado a 3 años
de Infantil, 4º de Primaria tenía como apadrinado a 4 años de Infantil, 5º de
Primaria tenía a 5 años de Infantil, 6º de Primaria tenía a 1º de Primaria y 1º
de ESO tenía a 2º de Primaria. A cada niño de la clase que apadrina, se le
asignaba un niño de la clase apadrinada, es decir, por ejemplo cada niño de 3º
de Primaria tenía asignado un niño de la clase de 3 años de Infantil, y así con
todas las clases. A lo largo del curso, se van haciendo diferentes actividades
entre apadrinadores y apadrinados, en las que los mayores, una vez al mes
aproximadamente van a la clase de los pequeños (apadrinados) y les leen cuentos,
se los representan con marionetas hechas por ellos mismos, etc.
Muchos de los alumnos, incluso a los que no les gustaba
leer, estaban entusiasmados por tener que buscar un libro para leer a su
apadrinado, y esto lo sé porque tuve la oportunidad de estar con ellos en dos
de las sesiones de esta actividad.
Creo que el simple hecho de sentirse responsables de algo,
de sentirse mayores y de tener que hacer algo para su apadrinado, ya es una motivación
para ellos. Sin embargo creo que al igual que puede haber niños a los que esta
actividad les acerque a la literatura y les meta un poco en el cuerpo el
gusanillo de leer, creo también que puede haber niños a los que esta actividad
no les motive, pues una cosa es leerte un libro que va destinado a niños más
pequeños, para ver si es adecuado o no para tu apadrinado y así después
leérselo, y otra distinta es leer un libro adecuado para tu edad, que es más
largo, y tiene menos dibujos.
Por todo esto es importante pensar bien lo que hacemos con
nuestros alumnos, y sobretodo conocerles, pues si conoces a un niño podrás
buscar libros que puedan gustarle más que otros y así que se los lea con más
aceptación y algo más de ganas.
Como webs interesantes, os dejo la de la Casa del Lector,
que tiene cursos y actividades muy interesantes relacionadas con la lectura y
con el fomento de ésta. http://casalector.fundaciongsr.com/
También
os dejo este documento que he encontrado por internet en donde nos explica
cosas sobre la animación y la desanimación a la lectura, e incluso nos da
ejemplos de actividades para realizar. http://labibliotecaescolar.files.wordpress.com/2012/04/capitulo5alalectura.pdf
También
he encontrado esta web, en donde rellenando un formulario y mandándolo te crean
un libro en el que la persona que tú elijas es el personaje. Me parece una
forma muy buena y original de acercar a los niños a los libros. http://www.librosunicos.com/
Para realizar este artículo
me he basado en los apuntes tomados en clase de Literatura, en los apuntes de “Fundamentación
teórica del proyecto lector “Mascapáginas” de la Editorial Pearson. Irune
Labajo, octubre 2011”, y en mis experiencias en los colegios de prácticas.
La parte más importante del bloque (desde el punto de vista teórico) es el de las actividades para antes, durante y después. Por eso es importante que las comentes y no te limites a copiar o resumir las del documento. Falta, además, la parte más emocional que es, tal vez, la que más nos interesa.
ResponderEliminarTampoco has comentado cómo debe llevarse a cabo la lectura de los libros literarios y de todo lo que expliqué sobre las diferencias entre la lectura silenciosa (comprensiva) y la lectura en voz alta (expresiva).
Con esos añadidos, tu artículo estará perfecto.